INS y pueblos indígenas fortalecen juntos la vigilancia comunitaria en salud pública

​Con el propósito de avanzar hacia una salud pública más equitativa e intercultural, el Instituto Nacional de Salud continúa impulsando su estrategia de Vigilancia Basada en Comunidad (VBC). Esta iniciativa, en esta oportunidad, integra el conocimiento técnico y los saberes tradicionales de los pueblos indígenas y demás comunidades étnicas para fortalecer la detección y el control oportuno de eventos en salud.

El último Boletín Epidemiológico Semanal (BES) publicado por el INS tuvo como tema central la vigilancia en comunidades indígenas, afro y otras poblaciones étnicas. El informe lleva como título Poblaciones de interés especial: grupos étnicos.

Según el BES de la semana epidemiológica 41 (del 5 al 11 de octubre de 2025), durante este año, a través de la vigilancia basada en comunidad en el país, los agentes comunitarios han reportado 551 situaciones de interés en comunidades étnicas, de las cuales 431 corresponden a comunidades indígenas y 120 a poblaciones afrocolombianas. Las principales situaciones reportadas en los territorios indígenas están relacionadas con malaria, complicaciones del embarazo y puerperio, desnutrición y violencias de género, mientras que en las comunidades afrocolombianas predominan los síndromes febriles.

Los departamentos con mayor número de situaciones reportadas son Boyacá, Nariño, Vichada, Putumayo y Meta, lo que refleja la presencia activa de agentes comunitarios y la consolidación de la Red de Vigilancia Epidemiológica Basada en Comunidad (REVCOM) como una red territorial que integra los saberes tradicionales con el conocimiento técnico en salud pública.

El INS ha impulsado, además, el plan de abordaje comunitario y el desarrollo de herramientas técnicas, como una guía específica para poblaciones en colaboración con la Universidad Nacional y un curso de abordaje comunitario junto a Amazon Conservation Team (ACT). Estas iniciativas buscan fortalecer la articulación territorial, la gobernanza en salud pública y el reconocimiento de la medicina tradicional y las prácticas de cuidado ancestral.

Desde la gestión del riesgo en salud pública, el INS promueve un enfoque diferencial que valora el ambiente, el territorio, la participación social, los saberes y las prácticas de cuidado ancestral, considerados pilares fundamentales para garantizar respuestas culturalmente pertinentes ante los riesgos que enfrentan las comunidades étnicas del país.

“El compromiso con la salud intercultural implica escuchar, aprender y construir conjuntamente. Fortalecer el autorreconocimiento y valorar los saberes ancestrales no solo mejora la vigilancia en salud pública, sino que también fortalece el tejido social y reafirma el respeto por la diversidad que caracteriza a Colombia”, destacó Diana Pava, directora general del INS.