El Instituto verificó el cumplimiento de los estándares de calidad de la Resolución 1619-2025. Lograron una calificación del 92,9 %.
Un equipo interdisciplinario de la Dirección de Redes en Salud Pública del INS se desplazó hasta Florencia, Caquetá, donde constató que el laboratorio cumpliera con los requisitos necesarios para volver a funcionar como ente de vigilancia en salud pública del departamento, considerado la puerta de entrada a la Orinoquía colombiana.
En esa línea, funcionarias del INS -del Laboratorio Nacional de Referencia y de la subdirección de Gestión de Calidad- verificaron que se cumplieran con los estándares de calidad para laboratorios en salud pública y con las herramientas de bioseguridad, biocustodia y biocontención, correspondientes al nivel BSL-2.
De acuerdo con la directora del Instituto Nacional de Salud, Diana Pava, la puesta en funcionamiento de este laboratorio de salud pública trae grandes beneficios para los habitantes de Caquetá y la región del Amazonas, porque se podrá vigilar de cerca eventos como: zika, dengue, malaria, leishmaniasis, infecciones respiratorias agudas y otras enfermedades endémicas.
La directora informó que el Laboratorio logró un puntaje de 92,9 % en el concepto de la aplicación de la herramienta de estándares, lo que lleva a que se ubique como el segundo en el país.
De hecho, el laboratorio desarrollará la vigilancia sobre el agua potable, una prioridad en el INS. A la par, contará con la implementación de biología molecular en SARSCOV2.
De igual forma, la directora del INS, destacó que las autoridades departamentales y directivas del Laboratorio han manifestado un compromiso con el fortalecimiento y cumplimiento de los estándares de calidad del LDSP.
Este compromiso se refleja en el cumplimiento de los lineamientos técnicos, normativos y de aseguramiento de la calidad definidos por el INS y por la Resolución 1646 de 2018, que establece las responsabilidades de los laboratorios departamentales dentro de la Red Nacional de Laboratorios.
Otro factor a destacar es que este Laboratorio está ubicado en una zona que se caracteriza por la ruralidad y con una población que tiene limitaciones de acceso a servicios esenciales, sumado a la presencia constante de enfermedades endémicas. Por lo que, su puesta en marcha constituye el nodo técnico-científico que articula la generación de información confiable, la toma de decisiones oportunas y la capacidad de respuesta ante riesgos sanitarios y epidemiológicos.